Durante una visita en un hospital de Tennessee, Estados Unidos, un Santa Claus vivió un estremecedor momento cuando un niño de cinco años que padecía cáncer, murió en sus brazos. El pequeño estaba muy delicado de salud, y como deseo de Navidad, pidió conocer a Papá Noel, lo que se le concedió, pero nadie imaginaba que lo estaba esperando para partir de este mundo.
La historia se ha viralizado en redes sociales, pues pese a que esto sucedió hace algunos años, el hombre que acompañó al menor en sus últimos minutos de vida, recuerda el momento como si lo acabara de vivir, ya que afirma que ha sido uno de los más duros de su existencia.
En aquel entonces, el Santa Claus tenía 60 años, y aceptó ir al llamado de auxilio que una de sus amigas enfermeras le hizo explicándole que había un niño muy enfermo en Knoxville, Tennessee, en Estados Unidos , que deseaba conocer al hombre que da vida a la Navidad.
Santa Claus sostuvo al niño con cáncer
Eric Schmitt-Matzen, se caracteriza del personaje de Santa Claus cada año y como parte de su labor, visita los hospitales infantiles para dar esperanza a los niños que se encuentran hospitalizados y que se ven obligados a pasar las fiestas decembrinas ahí.
Durante varias entrevistas, Erick indicó que una amiga enfermera lo llamó de urgencia para que fuera a visitar a un niño de apenas cinco años de edad que padecía cáncer y que su único deseo de Navidad, era conocer a Santa Claus.
“Mi teléfono sonó… del otro lado de la línea estaba una enfermera que conozco, ella trabaja en un hospital, me comentó que había un niño de cinco años que estaba muy enfermo y su mayor deseo era conocer a Santa Claus”.
El hombre en seguida aceptó, pero dijo que primero debía caracterizarse de Papá Noel. Inesperadamente, la enfermera le dijo que solo se pusiera lentes y tirantes, porque no había mucho tiempo antes de que el pequeño perdiera la vida ya que estaba muy grave.
“El pequeñín estaba muy débil, se veía como si estuviera lista para dormir eternamente. me vio y sonrió, yo me senté en la orilla de su cama y le dije: ¿Acaso escuchó que te vas a perder la navidad? ¡De ninguna manera te puedes perder la Navidad”.
Posteriormente le dijo que él era su duende favorito y el menor lo miró y le preguntó: “¿De verdad?”.
Santa Claus le dio un regalo al menor, mismo que lo abrió con mucho esfuerzo, pero mientras lo hacía, sonrió. Posteriormente lo abrazó y le preguntó a Eric cómo sabrá a donde ir cuando llegue al cielo.
“Cuando llegues, tú les dices que eres el duende número uno de Santa y vas a entrar de inmediato”.
Mientras tenían una tranquila plática, el menor abrazaba a Santa Claus, pero poco a poco sus bracitos perdieron fuerza y finalmente falleció en los brazos de Papá Noel.
Eric Schmitt-Matzen detalló que la madre del menor entró corriendo al cuarto al darse cuenta que su hijo había muerto, “le entregué a su hijo y me fui de inmediato. Me afectó tanto que me cuestioné si debía volver a interpetar a Santa Claus”.